3.2        EL “BLAZE”  DE LAS REDES

 

Las figuras 5-5 y 5-6 muestran esquemas de redes de transmisión que fueron las iniciales y tradicionales en las décadas del 40 y 50 pero luego fueron reemplazadas por redes de difracción pero de reflexión. En éstas cada surco es un espejo que refleja la luz en lugar de permitir el paso de ella a través de una ranura sobre la red. Este tipo de redes de reflexión ha permitido solucionar uno de los problemas más graves de las redes de difracción para el uso astronómico eficiente.

Las redes de difracción tal como las hemos descrito es que la luz es dispersada a través de un gran número de órdenes. La fracción de luz que se concentra en el espectro de nuestro interés, es decir para un n determinado, es pequeña con respecto a la cantidad de luz total. Además el máximo de intensidad cae en el orden donde no hay dispersión. En el orden cero la luz no se dispersa y por lo tanto las redes descriptas son bastante ineficientes pues una buena parte de la luz se pierde en ese orden. Para solucionar este problema se introdujeron las redes con “blaze” o sea redes que son capaces de llevar el máximo de intensidad a un orden determinado para  una longitud de onda dada. El “blaze” se consigue haciendo que cada surco de la red que puede representarse como un espejo individual,  forme un determinado ángulo con respecto a la normal a la red. Esto concentra la luz en un determinado ángulo sólido pequeño y único. Ese ángulo de inclinación entre la normal al espejo individual y la normal a la red, es el ángulo de “blaze” . La Figura (5-6) muestra la situación.

En los espectrógrafos que utilizan redes en órdenes bajos, 1 o 2, el blaze puede realizarse de manera que la luz se concentre en el espectro que se va a utilizar. De este modo se obtienen eficiencias del orden del 90%. En las redes que trabajan en órdenes más altos (“echelles”) también puede diseñarse un blaze pero en ese caso la luz se concentra en pequeños segmentos de muchos órdenes diferentes del espectro. 

En las especificaciones de las redes provistas por los fabricantes generalmente se indica el ángulo de “blaze” o la longitud de onda  del blaze para la montura tipo Littrow, es decir una montura donde a=b  y en el primer orden. Cuando se utiliza la red en otra configuración o sea  a distinto de b, la longitud de onda del “blaze” cambia por una pequeña cantidad.

 

 

De la Figura 5-6 recordamos que

 

 

ya que la reflexión en la faceta da el ángulo de blaze. Esta relación puede expresarse como,

 

                                                                                          (5-20)

 

Si escribimos ahora la ecuación de la red 5-3, tanto para el caso general como para el caso Littrow (a=b) tendremos,

 

 

                                                                                (5-21)

 

 para el caso general y,                                          

                                  (5-22)

 

si hacemos el cociente entre 5-21 y 5-22 obtenemos,

 

                                                                            (5-23)

 

La 5-23 nos dice que si nos apartamos 10° del ángulo de blaze de la red que fue realizada para 5000 A, la verdadera longitud de onda del blaze para el trabajo será , de 4980 A. Es siempre conveniente trabajar lo más cerca posible de las condiciones fijadas por el ángulo de blaze.